CON GUSTO
MEMORIA Y BASURA
EMILI PIERA
Fue una comida de antiguos compañeros de
trabajo, con muchas carcajadas pues la conversa se deslizó hacía las
triquiñuelas, imprevistos y desmanes que mis amigos tuvieron que sufrir o
perpetrar, por ellos mismos, para algo tan aparentemente sencillo como hacerse
un chalet: constituir una cooperativa, construir sin licencia (y legalizar
después), convertirse en promotores y hacer varias aportaciones extra en un
proceso de lustros. Garantizarse, con medios propios, la seguridad, los accesos
o el alumbrado. Hablaban de San Antonio de Benagéber –los de Benagéber,
estrictu sensu, celebraron la rave, o fiestón de cinco días del año nuevo porque,
dicen, les ha situado en el mapa–, y de los tiempos en que dependían de un
alcalde, socialista, que adjudicó una contrata de basuras por más de veinte
años: se nota que pensaba durar més que
un cul de morter en un bancal.
Ahora son municipio independiente, pero
tienen imputados al alcalde, del PP, y al concejal Felipe del Baño –muy
mentado a raíz de la dimisión de Juan Cotino– por supuesta
prevaricación: el uno porque logró, presuntamente, desmaterializar 50.000 euros
por la edición de un libro, non nato, sobre la historia del municipio que, como
se constituyó a mediados de los noventa, tiene una biografía que cabe en un tebeo,
y sobra espacio. Con 50.000 euros uno edita todos los volúmenes de La Comédie humaine con tapas de piel y
cantos dorados. El otro, el concejal, trató con aparente trapacería un asunto
de recogida de residuos verdes, ya ven cuan nutritivas son la memoria y las
basuras en estas prodigiosas alturas que se llaman Cumbres de San Antonio,
Colinas de San Antonio o Montesano, cualquiera diría que son los Alpes
Marítimos y no unos secanos algo pedregosos pero irrigados.
Entonces uno se para y piensa: si esos
chanchullos ocurren en un pueblo de siete mil habitantes, neorurales pero
menos, carne de urbanización, qué no pasará en mayores concentraciones de
gente, niveles de opacidad y posibilidades presupuestarias. A ver si alguno
hace un libro sobre eso. Con menos de 50.000 euros, porfa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario