CON GUSTO
PUGILATO POLÍTICO
EMILI PIERA
La política es un combate sucio y
marrullero que ya vamos perdiendo mucho antes de que suene la campanilla del
primer asalto. A la primera distracción, te derriban sobre la lona: y no te
hacen la merced de contar hasta diez, prueba de ello es la forma sumarísima con
que han sido apartados de la carrera Rodrigo Rato, Alfonso Rus y,
antes, Tomás Gómez (sin tener la oportunidad de corromperse). No es que
unas elecciones sean como suele decirse “la fiesta de la democracia”, una
fiesta es una fiesta, carajo, pero tiene su importancia como sistema de
provisión de cargos y formación de mayorías. Las mayorías, mandan: no tanto
como los bancos y el Imperio, pero mandan. Así pues, mucho ojo.
Por ejemplo a nuestra paisana Núria
Roca le han puesto una multa de 15.000 euros por llamar “choriza sin
paliativos” a una choriza no sé si con atenuantes. Si a una señora la pillan en
pijama en compañía de su promotor favorito ¿debemos colegir que estaban
resolviendo puzles? Pues igual sí porque resulta que los planes de ordenación
urbana al final encajaban al gusto de los integrantes de la fiesta de pijamas.
Propongo que a partir de ahora de los usos correctos del idioma se haga cargo la
autoridad competente, lingüística por supuesto: la Real Academia de la Lengua,
no solo las razones que debieran resultar obvias, sino porque nos saldría más
barato y, encima, no habremos de aprender que sólo el que manda decide qué
significan las palabras.
La izquierda se presenta esta vez muy
fragmentada. En la variedad está el gusto, pero si tantas ganaderías y hierros
no muestran alguna flexibilidad, paciencia, espíritu negociador y, sobre todo,
ausencia de doctrinarismo, lo que nos aguarda a la vuelta de la esquina
convertirá a Silvio Berlusconi en un modelo de intelectual comprometido.
Las expectativas son buenas, lo nuevo se abre paso, pero no hay más que ver el
desgaste de Podemos por el caso Monedero, organizado por quienes se
hicieron cargo de los bancos para atracar a los impositores, para saber que no,
no mandamos y el árbitro es, como de costumbre, del Madrid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario